Infiniti Q60 Red Sport 400

Infiniti Q60 Red Sport 400, no siempre el hábito hace al monje. 

Por: Roger Rivero

La pluma y la inspiración de Alfonso Albaisa, el vicepresidente de diseño global de Nissan e Infiniti, han salido autos esplendidos y hermosos. El Q60 quizá uno de los más significativos.

Este cupe creo nunca se vio más hermoso que cuando transito altanero por al Malecón de La Habana en el 2016, cuando el cubano americano Albaisa allí lo llevo, convirtiéndose en el primer auto importado desde Estados Unidos que entraba en la isla comunista desde 1959.

La Habana mucho ha cambiado desde entonces, sobre todo en las últimas semanas, no así el Infiniti Q60 en producción desde 2016. Sin grandes cambios, no es sorpresa que sus ventas han decrecido, sobre todo si consideramos que su competencia viene básicamente de coches alemanes de lujo o japoneses como el flamante Lexus RC.

Desde afuera y por dentro

El Q60 es la versión cupe sedán de cuatro puertas Q50, y aunque el parecido es sustancial, la maleabilidad de sus formas favorecen más al Q60. Este auto no solo es el líder en rendimiento de la familia Infiniti, sino que también es el zar del estilo. Las proporciones del auto son muy acertadas, y tiene la fluidez de diseño a que nos ha acostumbrado la casa japonesa.

Infiniti absolutamente acierta con el aspecto del Q60, especialmente el modelo Red Sport 400 más agresivo que probamos. Las llantas de 20 pulgadas exclusivas del Red Sport, las pinzas de freno rojas y trabajos de pintura exclusivos hacen que un Q60 brille donde quiera que lo lleves.

Tanto placer visual exterior se disipa algo cuando nos adentramos en el Infiniti. Si bien el diseño es limpio y organizado y los materiales no decepciones en su mayoría, mirado en su conjunto se ve algo anticuado si lo comparamos con modelos similares alemanes. Los modelos base tienen cuero sintético, mientras que Luxe y Red Sports se ven elegantes con cuero suave semi-anilina.

Los asientos delanteros son cómodos y tiene buen soporte. Hay espacio suficiente para sentirse cómodo en ellos, con la excepción del cinturón de seguridad. Me gusta conducir más bien cerca del volante, y no puede encontrar una posición de manejo donde el cinturón dejara de molestarme.

Como casi la totalidad de los cupés, el asiento posterior es poco recomendable para adultos. El espacio en el maletero también es limitado, uno de los menores de su clase.

Equipamiento y seguridad

Para el 2021 las mejoras del Q60 se concentran principalmente en varias prestaciones que se adicionan de forma estándar y por las cuales antes se debía pagar extra, aunque es bueno aclarar que la bondad comienza en el nivel de acabado Luxe, donde se incluyen este año luces altas automáticas, monitoreo de punto ciego, asistencia para mantenerse en el carril y control de crucero adaptativo.

El Infiniti Q60 de nivel de entrada solo trae estándar la advertencia de colisión frontal. El resto de las prestaciones hay que adicionarlas separadamente y este es un campo donde más generosidad podría Infiniti mostrar. 

Algunos no son partidarios del sistema de dos pantallas de Infiniti llamado InControl. No tengo nada en su contra, aunque debo reconocer que los gráficos se ven anticuados y necesitara algún tiempo para aprender a navegar por los menús algo confusos. Esta podría ser otra área de perfeccionamiento para la nueva generación del Q60.

Infiniti actualizó recientemente el sistema con Apple CarPlay y Android Auto, y tener dos pantallas realmente hace las cosas mucho más fáciles aquí. La conexión con estos sistemas se proyecta en la pantalla superior, mientras que el sistema de info-entretenimiento Infiniti reside en la parte inferior, permitiendo usar mapas desde los teléfonos en la parte superior y en la inferior controlar cosas como el audio o el clima, haciendo que la operación sea fluida.

En la carretera  

El 2021 Q60 está propulsado por un motor V-6 biturbo de 3.0 litros que genera 300 caballos de fuerza en forma estándar y 400 en el modelo Red Sport 400 como el que probamos. Completan el tren motriz una transmisión automática de siete velocidades y tracción trasera estándar u opcional en las cuatro ruedas.

La tracción total hace que el Q60 sea un mejor vehículo en carreteras sinuosas, distribuyendo el agarre según sea necesario. Pero sin tracción en las cuatro ruedas, este cupé funciona bien, aunque su distribución de peso de 57 delanteros a 43 traseros no es la propuesta ideal 50-50 ofrecida por algunos de sus competidores.

Si bien mis primeros recorridos me dejaron algo desencantado, pues la transmisión no mostró ser lo diligente que esperaba, todo cambio cuando coloque el Q60 en modo de manejo Sport. Allí lo dejé durante el resto de la prueba, y es que cambia mucho este auto (y para bien) cuando lo colocamos en esa posición de manejo. Si lo que busca en el Infiniti Q60 es rendimiento, su opción es un Red Sport 400.

Infiniti emplea su sistema propietario drive-by-wire conocido como Direct Adaptive Steering para hacer avanzar las entradas de la computadora desde el volante, directamente a las ruedas para controlar la dirección. 

Este sistema es elogiado par algunos y detestado por otros. Yo me inclino más para el segundo grupo, sobre todo por las “piruetas” extrañas que este sistema algunas veces hace. Donde vivo, el uso de cadenas y llantas de invierno crean una especie de zanjas o concavidades en las autopistas. Cambiando de un carril a otro el Q60 hace sus trucos en la dirección, y quien no este acostumbrado puede que se sobresalte innecesariamente.

El sistema de suspensión adaptativa agregado al Red Sport 400 hace su trabajo, mejorando la suspensión delantera y trasera de doble horquilla en consecuencia. Los amortiguadores adaptativos absorben el pavimento imperfecto como una esponja, e incluso en los modos Sport o Sport Plus más firmes, la calidad de conducción sigue siendo bastante lujosa.

La insonorización es otro fuerte punto de venta del Q60. Incluso a velocidades de autopista, poco o ningún ruido del viento o de la carretera penetra en la cabina. 

El consumo de combustible de 23.5 millas por galón en manejo combinado (10.01 L/100km) es típico, si los comparamos con los pocos modelos con motor V6 en la competencia. 

Para escoger

Infiniti fabrica el Infiniti Q60 cupé del 2021 en tres niveles de equipamiento: Pure, Luxe y Red Sport 400. Vale la pena escoger un modelo Luxe por sus características adicionales de asistencia al conductor. Si le interesa el motor V6 biturbo de 400 caballos de fuerza, tendrás que conseguir el Infiniti Q60 Red Sport como el que probamos. 

El Q60 Luxe tiene precio inicial de $41,750, mientras que el Luxe que recomendamos comienza en los $50,300. Le puede agregar el paquete Essential, que cuesta $ 2,050 y agrega navegación controlada por voz, un sistema de control de clima avanzado, arranque remoto y un volante eléctrico ajustable.

El modelo más potente Red Sport 400, arranca en los $58,200, lo que lo coloca en un rango de precio que hace explorar por otras opciones.  Si bien los alemanes lo sobrepasaran, un Lexus RC F con motor V8 no se aleja mucho de ese número.

Los principales competidores vienen de Alemania, como el BMW M440i xDrive, Audi S5 o el Mercedes-AMG C43 4Matic cupé. 

Concluyendo

El amor entra por los ojos, y en materia de automóviles no cambia esa dinámica. El Infiniti Q60 es uno de los cupés más hermosos en las carreteras, y esto lo beneficia si es que alguien pudiera reparar en algunos de las faltas que pueda tener.

Es un esfuerzo serio por parte de Infiniti, pero hay muchas áreas en las que se pueden hacer mejoras para que, en su conjunto, pueda admirarse este auto con la misma pasión que despierta su diseño.

Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.